domingo, 19 de diciembre de 2010

Reflexiones antes de iniciar un curioso paratexto...

Responsabilidad de la escritura: atreverse a habitar en el torbellino de los anillos que cada palabra reclama para sí. Consigo y con todos, no dejar de acariciarlas, detenerse en ellas, pedirles dar cuenta de sus enigmas y después... entregarse sin reservas al amor por ellas propinadas.
El anillo - resolución del problema de la letra, su inscripción y participación en el pensamiento. Tarea de la reflexión: estudio más íntimo con el "Eterno Retorno", en las voces de Nietzsche y una muy controversial interpretación, la de Heidegger, sin duda.
Pero los anillos no se cierran es este punto: concitar en la escritura el juego de Fort-Da, freudiano lacaniano, lugar en el cual también los círculos, elipses, arcos y entidades circulantes parecen abogar por la LEY inescrutable del retorno, el cambio, la vuelta... el "contra-don", la amortización de la deuda que establecemos con la lengua, con nuestras palabras... todo ello en una suerte de intromisión paratextual con imágenes, esquemas, citas y fuentes. Hacer del arte de la cita un vehículo donde la letra se detenga, produzca un cortocircuito, que trabe así toda operación de retorno. Publicación en la forma más genuina de un ensayo; es decir, sea capaz de suspenderse el texto a cada momento, cómodo para la reflexión, cómodo para cualquier lector.